jueves, 24 de febrero de 2011

EL CEREBRO DE LOS BEBÉS


Sabemos algo de los niños pero no de los bebés de entre 1- 2 años.
Muchas veces decimos que los bebés son aburridos, porque no sabemos lo que ocurre en su cerebro. Cuando un bebé llora, cada persona puede hacer una cosa distinta: dejar que el niño llore, ir corriendo a cogerle…pero, ¿Qué es lo que verdaderamente tenemos que hacer?
Debemos de ocuparnos de los bebés, ya que a través de numerosos  estudios se está descubriendo, que el amor es importante como modulador del comportamiento, como el fin  para acabar con la violencia en un futuro. La primera infancia es la base de la salud mental, ya que durante este periodo se desarrollan muchos sistemas importantísimos en el cerebro (de tipo emocional) por ejemplo aquellos que regularán el estrés. Todo lo que sucede durante esos dos primeros años repercute en el cerebro. No  se nacen con los sistemas cerebrales formados, ni son automáticos, sino que éstos se desarrollaran dependiendo del ambiente en el que crezca el bebé, y con las personas con las que esté. En esta etapa el cerebro establece conexiones a unas velocidades que jamás alcanzará. Todos los sistemas son muy susceptibles  mientras que se están formando.
Para que los seres humanos lleguen a ser independientes deben de haber sido primero dependientes.
Sabemos que el cuidado de los niños no es una ciencia exacta, ya que depende de cada niño y de lo que el bebé cada niño pueda tolerar. Lo importante es que el bebé no es estrese demasiado. Los bebés necesitan una atención personalizada ya que fomentará el desarrollo del sistema cerebral.
Los bebés son increíblemente interesantes, sobre todo cuando conocemos lo que ocurre dentro del cerebro de un bebé.
Sabemos que los niños que tienen unos vínculos afectivos seguros funcionan mejor en la escuela, logran entablar una mejor relación con sus compañeros…
Al nacer no tienen ninguna experiencia visual, y se ven sometidos a imágenes y sonidos. Cuando llega a la escuela ha asimilados 14.000 palabras. A los 10 meses tienen patrones de compresión sorprendentes pueden asociar palabras con su imagen incluso con objetos que no han visto nunca.
Los bebés utilizan todos los recursos cognitivos que pueden. El tacto es importante para el desarrollo, hay que tocarlo, cogerlo, llevarlo a los sitios, sostenerlo…ya que todo lo que genera placer ayuda a que se desarrolle las funciones superiores del cerebro, hay que mantener el contacto visual, jugar…todo ayuda. Ayuda a la región arbitraria central del cerebro.
Por ejemplo hay persona con trastornos de la personalidad… y nos percatamos de que todo apunta a la primera infancia. Hay muchos problemas en la sociedad que estén muy relacionados con la primera infancia, hay que prestar atención a esta etapa ya que muchos problemas de la depresión, trastornos de la personalidad…están relacionados con ésta.
Por lo tanto es la primera infancia la etapa con mayor importancia en la vida de un niño, aunque hasta ahora muy poca gente lo hubiera percatado así, durante esos dos primeros años tras el nacimiento se desarrollaran numerosas partes del cerebro, las cuales muchas no conocemos. Por ejemplo la amígdala será la que regule las emociones, como la ansiedad… será la que mantenga nuestro equilibrio emocional. En conclusión no debemos despreciar esta etapa…y debemos preocuparnos por el buen desarrollo emocional de los bebés.